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Reseña: La suerte del enano de César Pérez Gellida, (Suma, 2020)

La suerte del enano de César Pérez Gellida es una novela negra con historias de museos y robos que he disfrutado muchísimo ya que ese mundillo me atrae pero lo más disfrutón para mi han sido los toques de humor que el autor utiliza para desestresar al lector de las partes más negras de esta historia.

La ficha técnica del libro la podemos consultar en la página web de penguinlibros.





Argumento

¿Se puede capturar al criminal perfecto?

Valladolid, 2019. Sara Robles es una inspectora singular. Encargada de resolver un macabro crimen, además tiene que lidiar con sus problemas cotidianos, estrechamente relacionados con la adicción al sexo y con un pasado que no termina de curar. Mientras tanto, El Espantapájaros, una misteriosa cabeza pensante, ha orquestado el robo perfecto junto a un exminero, un pocero y un sicario, y está a punto de llevarlo a cabo a través del alcantarillado de la ciudad.

La suerte del enano es una brillante novela con altas dosis de investigación policial, sexo y violencia en la que el lector profundizará en el complejo mundo de los robos de obras de arte y sus extensas ramificaciones que los relacionan con grupos de delincuencia organizada.

Gellidismo extremo en estado puro.


Mi opinión personal (sin destripes)

"La suerte del enano que fue a cagar y se cagó en la mano". ¿Conocéis este dicho? Yo no, pero me ha encantado y creo que lo guardaré en mi memoria ya que como ocurre en la novela alguna vez, bueno últimamente más de lo que yo quisiera, me han sucedido un encadenamiento de desgracias que cuesta asumir. Y este dicho tiene mucho que ver con lo que ocurre en la historia de La suerte del enano, ya que a Sara Robles, la protagonista, no paran de sucederle un encadenamiento de desgracias muy, pero que muy desproporcionadas.

Desgracias y consecuencias de ellas sentidas que se producen de un modo natural, no se pueden evitar. Retorcidas y sintiéndolas como lógicas. Gran maestría de César Pérez Gellida para crear estas realidades tan rizadas y rizadas y que el lector las consideré normales, tienen que ser así y punto. 

Maestría también de este escritor para saber engañarnos creando trampas con argucia sin esperarlas, logrando seducirnos con ellas. A mi me ha cautivado con todo esto y estoy segura que todo lector también caerá como un corderito en las garras astutas de este lobo de la literatura negra española.

También quedo asombrada por el atrevimiento de empezar la narración por un suceso que tiene lugar casi al final de la historia, imagino que con el objetivo de que veamos la situación a la que ha llegado cierto personaje tras los diversos sucesos ocurridos, inimaginables para mi y seguro que para vosotros también. Este comienzo no hace que se pierda el interés ni que el ritmo de la novela se vea afectado, todo lo contrario enriquece la construcción de la novela.

«Y ahí, precisamente ahí, encontró Sara el quid de la cuestión: lo circunstancial no suele determinar el resultado pero puede terminar siendo una mierda. Es decir, una desgracia.

Una desgracia como la que le ocurrió al enano, que fue a cagar y se cagó en la mano.

Una desgracia como la que le acaba de ocurrir a ella.

A no ser que no considere como tal morir antes de tiempo y admita de una vez por todas que a la suerte y a la muerte tan solo les diferencia una letra».

La trama principal de la novela es el robo de una obra de arte en un museo y el crimen organizado, estos temas están muy bien tratados por el autor y muy bien dosificados para mostrarnos como funciona la seguridad de un museo y el trabajo de las fuerzas y y cuerpos de seguridad en lo referente al patrimonio histórico sin que el lector pierda el interés por la intriga y el suspense.

Quiero destacar el protagonismo de la ciudad de Valladolid, ambientación que te invita a visitar la ciudad y conocer de primera mano los lugares que aparecen en la novela, destacando en esta historia las alcantarillas y el subsuelo de la ciudad, no para visitar pero si de vital importancia para la ambientación de la novela.

Disfrute muchísimo con los personajes que se encuentran en el lado oscuro de esta historia, El Espantapájaros es un ladron de guante blanco, inteligente y sabedor de un plan que no puede fallar y os confieso que yo empatice con él ya que sentí que él pensaba que no estaba robando, estaba convencido de que el arte no debe estar siempre en posesión de los mismos. El otro personaje del lado oscuro es Samir Qabbani, un mercenario valorado en su sector y cumplidor con su oficio.

Los toques de humor son grandes y muy, muy divertidos. Me lo he pasado genial, a pesar de la brutal historia, con ciertas situaciones y con con los distintos tipos de humor. Perfectos para que ante los momentos sanguinarios que vivimos en la historia saboreemos este bálsamo humorístico que nos regala el escritor relajándonos un poquito.

Recomiendo leer La suerte del enano de César Pérez Gellida por todo lo que os he contado (que ha sido mucho, ya sabéis que me gustan las reseñas cortas), añadiendo que ha sido un placer regocijarme en la calidad de su prosa y de su buena estructura, precisa e innovadora. 

No dejéis pasar este título, queridos lectores de novela negra.

¿Existe el robo perfecto?




César Pérez Gellida nació en Valladolid en 1974. Es Licenciado en Geografía e Historia por la Universidad de Valladolid y máster en Dirección Comercial y Marketing por la

Cámara de Comercio de Valladolid. Desarrolló su carrera profesional en empresas vinculadas con el mundo de las telecomunicaciones y la industria audiovisual hasta que, en 2011, decidió dedicarse en exclusiva a su carrera de escritor.

César irrumpió con fuerza en el mundo editorial con Memento mori, que cosechó grandes éxitos tanto de ventas como de crítica y obtuvo el premio Racimo de literatura 2012. Constituía la primera parte de la trilogía «Versos, canciones y trocitos de carne», que continuó con Dies irae y se cerró con Consummatum est y por la cual le fue otorgada la Medalla de Honor de la Sociedad Española de Criminología y Ciencias Forenses 2014 y el Premio Piñón de Oro como vallisoletano ilustre. En 2015 publicó Khimera, su cuarta novela, y en 2016 inició su segunda trilogía, «Refranes, canciones y rastros de sangre», compuesta por las novelas Sarna con gusto, Cuchillo de palo y A grandes males.

Actualmente sigue escribiendo novelas y colabora como columnista en El Norte de Castilla.


Podéis comprar La suerte del enano de César Pérez Gellida aquí:






¿Habéis leído este libro? ¿Tenéis ganas de leerlo? ¿Qué os ha parecido?




5 comentarios:

  1. ¡Hola!
    He leído dos libros del autor y me han encantado, así que este me lo apunto sin dudar.
    Besitos :)

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  2. ¡Hola Carmen!
    que bien que hayas disfrutado tanto con esta novela. ¿sabes? llevo tiempo queriendo leer a este autor, porque estoy convencida de que merece mucho la pena, pero las trilogías me dan pereza. Por eso quería preguntarte, esta no forma parte de ninguna saga? ¿o igual es la primera de alguna que recién empezó? Me atrae mucho ese toque de humor que cuentas tiene para que las "desgracias" parezcan menos desgracias
    Besos

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  3. Aún está entre mis pendientes. No soy yo muy forofa de este autor, pero me gustó Todo lo mejor y quiero leer después Todo lo peor. No sé cuándo le tocará a La suerte del enano, que veo que te ha gustado mucho. Espero que no se demore demasiado.
    Un beso.

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  4. Tuve mi época gellidsta durante la que me leí sus dos trilogías y "Khimera". Tras esta etapa decidí parar un poco y así llevo ya unos dos años. Creo que va siendo hora de regresar a César Pérez Gellida porque es un autor que me gusta mucho por lo que tú misma señalas en tu reseña: que sitúe o muchas de sus obras tengan relación con Valladolid, algunos rasgos de humor y sobre todo los giros que da a sus tramas haciéndonos ciertas trampas que nos dejan así como con expresión de enorme sorpresa.
    Buen finde y muchos besos

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  5. Hola.
    No suelo leer libros de este genero pero tras leer tu reseña creo que este libro me gustaría así que me lo voy a anotar para leerlo en un futuro.
    Nos leemos.

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Gracias por comentar. ♥