Mesa para dos de Amor Towles es una obra para degustar elegancia, humor, e ingenio narrativo.
Maravillada me quedé ante el estilo tan elegante y ante las narraciones tan profundamente humanas que he leído.
Seis relatos y una novela breve para mostrar la brillantez de Towles al crear historias que atrapan la esencia de las relaciones humanas con emotividad y reflexión.
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Argumento
Aparentemente inconexas, todas estas historias presentan un momento crítico en que dos personas deben sentarse a una mesa para abordar asuntos tan universales como la búsqueda de la felicidad, el poder del dinero o la subversión de las normas sociales.
Así sucede en relatos tan conmovedores como «La cola», que sigue el periplo de dos campesinos rusos, Pushkin y su mujer Irina, desde su aldea hasta Nueva York pasando por Moscú, mientras intentan desarrollar su potencial sin traicionar sus ideales; o en «La balada de Timothy Touchett», donde un escritor frustrado acepta un trabajo poco edificante hasta que Paul Auster se cruza en su camino. O en «Eve en Hollywood», una vibrante novela con tintes de género negro que nos permite reencontrarnos con Evelyn Ross, la indomable protagonista de Normas de cortesía, aquí decidida a labrarse un futuro entre platós, bungalós y los antros más oscuros de Los Ángeles de los años cuarenta.
Mi opinión personal (sin destripes)
Quiero destacar varios temas en este libro presentes, casi todos, en todas las historias que Amor Towles nos narra.
Uno de los temas centrales para mi es el impacto de los encuentros breves y significativos. Towles muestra cómo en un encuentro inesperado interactuamos aparentemente sin notarlo y sin dar importancia a algo novedoso que nos genera observación, reflexión y meditación, dirigiendo una mirada hacia nuestro interior para cambiar la percepción que una persona tiene de sí misma o de su vida. Y en sus historias estos encuentros siempre se presentan aderezados de un diálogo fluido y lleno de matices.
El siguiente tema que quiero destacar es la soledad, abordada delicadamente pero con tal eficacia que abruma su potencia y su poder. En todas las historias los personajes llevan consigo una carga emocional que estalla a lo largo de la conversación. Towles sabe mostrar cómo la vulnerabilidad compartida puede crear una conexión momentánea y profundamente auténtica, aunque sea fugaz.
También reflexioné con esta lectura sobre las elecciones de vida y las oportunidades perdidas. A través de los protagonistas de Mesa para dos observé cómo las pequeñas decisiones diarias pueden cambiar el rumbo de una vida y cómo en los momentos que conectamos con cualquier persona por el motivo que sea frenamos el frenético ritmo que la actualidad nos marca.
El estilo narrativo de Towles es muy sabroso para mi al demostrar habilidad para equilibrar economía narrativa con profundidad emocional, qué genialidad. Su escritura es sencilla pero muy evocadora, con descripciones precisas que capturan el ambiente íntimo de un encuentro y al mismo tiempo la tensión emocional de la conversación. Utilizando, como he reflejado antes, diálogos ligeros y realistas. Una curiosidad: yo como lectora me sentía una espectadora invisible en cada historia.
Otro arte en la escritura que me ha gustado de Towles es su ritmo bien medido. Sabe cuando y como introducir elementos de los pasados de los personajes de forma sutil y con delicadeza, dejando vacíos para que yo los rellene con mi imaginación. Así se consigue una conexión más personal con la historia, y al mismo tiempo mima a sus personajes para evitarles una exposición excesiva ante los lectores; haciéndolos más reales y más creíbles. ENCANTADOR.
Leed Mesa para dos de Amor Towles y veréis como es un ejemplo de cómo una narrativa breve puede impactar tanto o más que una novela extensa. Yo terminaba de leer una historia con tal goce que quería otra más ya que sabía que me volvería a sorprender con un nuevo goce lector. Y después de terminar una historia se quedaba en mi con gusto un tiempo, resonando en mi cabeza y en mi corazón.
Este libro es una valiosa joya literaria que enamorará a los lectores que busquen historias con alma, profundidad y sensibilidad. Apreciando la belleza que contienen los momentos cotidianos y sus conexiones. Amor Towles convierte lo ordinario en extraordinario.
«Todos tenemos defectos. Unos grandes y otros pequeños. Unos que vienen y van, otros que persisten. Yo, por ejemplo, no me acuerdo de los cumpleaños. No siempre soy amale con personas la mar de agradables a las que acabo de conocer. Cuando me incomodan, aunque sea poco, no puedo resistir la tentación de hacerle saber a la persona que me ha incomodado que me ha incomodado. Y tiendo a dejar que mis prioridades eclipsen a las de otros, incluso las de mis seres queridos. Quizá especialmente las de mis seres queridos.
De repente, en la cola del servicio de atención al cliente, pensando en todo lo que acababa de suceder, mi mayor deseo, un deseo por el que habría estado dispuesto a rezar, era que, pese a todos mis defectos, cuando llegara el momento, porque seguro que llegaría mi mujer estuviera dispuesta a luchar por mí con tanto empeño como Jennifer había luchado por su marido».
Amor Towles (Boston, 1964) se graduó en la Universidad de Yale y completó estudios de posgrado en Literatura Inglesa en la de Stanford. Es autor de las novelas Normas de cortesía, Un caballero en Moscú, estrenada como serie de televisión con gran éxito, y La autopista Lincoln, y del libro de relatos Mesa para dos, cuatro obras publicadas en español por Salamandra de las que se han vendido más de seis millones de ejemplares y que se han traducido a más de treinta y cinco idiomas. Tras haber trabajado como profesional de las finanzas durante más de veinte años, Towles se dedica a tiempo completo a escribir en Manhattan, donde vive con su esposa y sus dos hijos.
¿Habéis leído este libro? ¿Tenéis ganas de leerlo? ¿Qué os ha parecido?
¡Hola!
ResponderEliminarCada vez me interesan más los libros de relatos, creo que es un género que merece mucho la pena explorar. Me apunto este título, que trata temas que me interesan muchísimo. ¡Gracias por tu reseña!
Nos vemos entre páginas
La vida de mi silencio
Leí el año pasado Un caballero en Moscú y me encantó, por lo que cualquier cosa del autor está en mi lista de pendientes, aunque preferiría otra novela a un libro de relatos.
ResponderEliminarUn beso.