Qué rabia me da cuando realizo mi selección de novedades de cada mes dejar pasar trabajos que más tarde descubro y sé que deberían figurar en esa selección por su excelente calidad literaria. Y esto me ha ocurrido con Las vidas que no viví de Patricia Almarcegui.
Argumento
Una historia de jardines, migraciones, éxodos y mujeres que buscan un lugar propio.
Anna y Pari son dos mujeres que se encuentran en Menorca, en torno a un hotel abandonado y ocupado, y un huerto rescatado del olvido. Anna, originaria de la isla, regresa ahora en medio de una crisis íntima, después de muchos años fuera. Pari llegó desde Irán tras abandonar su vida anterior, y espera la posible llegada de un visitante.
Las vidas que no viví es una novela sobre destinos y espacios en reconstrucción; sobre jardines y huertos; sobre cuerpos que habitan y cuerpos que ya no pueden habitarse. Y es, también, el relato de una isla y un país encontrados en los éxodos y la migración: a lo largo de la conversación que mantienen las dos protagonistas, emergen relatos históricos sobre Menorca e Irán: naufragios, invasiones, incendios, viajes, objetos perdidos y reencontrados.
La memoria de dos familias, y su futuro, son los puntos de partida de esta novela de Patricia Almarcegui, autora del celebrado libro de viajes Cuadernos perdidos de Japón, en la que las desigualdades de género, el problema de la vivienda, las migraciones y el derecho a olvidar ciertos episodios de nuestra vida, atraviesan los encuentros y las historias que comparten Anna y Pari, a la espera del desalojo del viejo hotel de Torrepetxina.
En este libro vamos a viajar con dos mujeres por dos islas, muy hermosas y también muy crueles. Hermosas y crueles como la vida, como la naturaleza. Son islas y mujeres hermosas y golpeadas. Una novela donde distintos temas se diluyen en favor de la atmosfera, de su voz y de su tono. Se huele el mar y se sienten las olas.
El título es precioso, creo que con él se quiere resaltar que la vida son las cosas vividas por nuestra elección y las cosas vividas no elegidas y que nos gustaría olvidar. Y también las cosas que no se han vivido y nos gustaría vivir.
Más adjetivación que objetivación para despertar en el lector la mismas sensaciones que el personaje siente. Palabras exactas, delicadamente seleccionadas. Palabras en castellano y palabras en menorquín, todo fluyendo de forma natural.
Voces en primera persona, conversaciones y voz en tercera que narra acontecimientos y situaciones historicos que no se vivieron, acontecimientos menorquines e iranies. Todo trabajado finamente y con pasión.
Pequeñas historias y grandes historias que nos hablan de desigualdades de género, de los migrantes, de ocupación... Y fundamentalmente de lugares y vidas destruidas que se deben rehacen sin sentirse culpables por nada de lo vivido, vidas que les queda mucho por vivir.
Leed Las vidas que no viví de Patricia Almarcegui para aprender a compreder otras vidas y a la vez la nuestra. Y para amar Menorca e Irán.
Patricia Almarcegui (Zaragoza) es escritora y profesora de Literatura Comparada. Ha publicado numerosos ensayos y libros de viaje: Los libros de viaje: realidad vivida y género literario (2005), Ali Bey y los viajeros europeos a Oriente (2007), El sentido del viaje (2014, 2º premio de ensayo Fray Luis de León), Una viajera por Asia Central (2017), Conocer Irán (2018), Los mitos del viaje. Estética y cultura viajeras (2019). Y es autora de las novelas: El pintor y la viajera (2011, traducida al francés y al persa) y La memoria del cuerpo (2017).
Ha sido profesora invitada en The American University in Cairo y en la Sorbonne, París IV. Ha realizado estancias de investigación en el Instituto de Literatura Comparada y Sociología de la Universidad de Columbia, Nueva York. Su investigación se centra en la Estética Literaria y los Estudios Culturales.
Es colaboradora de Diario.es y de los suplementos culturales ABC, La Vanguardia y El País, y ha publicado artículos en Cuadernos hispanoamericanos, Revista de Occidente, Jot Down, Quimera, Altaïr Magazine…
Tiene una pinta estupenda. Apuntado.
ResponderEliminarMenorca e Irán me parece una mezcla de lo más atractiva y si ambos lugares están representados por mujeres y sus conflictos y las memorias de sus familias, se me hace muy apetecible. Anotada queda.
ResponderEliminarUn beso.
Buena reseña. Tomo nota. Parece interesante. Gracias por la información. Un abrazo
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