Cómo empezar a escribir historias de texto de Javi Torres (buenosescritos.com)

Este mes finaliza la sección escribir bien del blog con un artículo especial.
Con un texto de Javi Torres de la web buenosescritos.com, un gran broche de oro.

Me despido deseando que mis entradas hayan sido de utilidad.


¿Por qué escribir bien?

Para expresar nuestras ideas con exactitud y argumentos sólidos.

¿Cómo lograr escribir bien?

Escribir bien es una habilidad que requiere conocimiento y mucha, mucha práctica.

En el artículo de Javi Torres encontraremos sabias estrategias para escribir historias.
Visitad su web https://www.buenosescritos.com/ para profundizar más.


Y como siempre os digo, recordad que vuestras palabras son vuestra imagen.

¡Felices escrituras!

Artículo de Javi Torres. 

Escribir narraciones que cautiven es el sueño de quienes

piensan sumergirse en el mundo literario creativo. Pero

cuando intentan contar algo -sobre todo en los inicios- las

ideas se enmarañan en la hoja en blanco o la pantalla del

ordenador; los personajes apenas son guiños de personajes

y... el relato, terco, se atora, no fluye. Podría decirse que eso

es normal cuando alguien no sabe cómo empezar a escribir

historias.

Sin embargo, para iniciar una narración hay que empezarla

bien, con garra, para que el lector no se vaya a otro texto.

Esta habilidad se consigue con el tiempo, con el buen

dominio del oficio de escribir.

Pero, cuando alguien se inicia o pretende iniciarse en el

fascinante, pero a la vez duro trabajo de la escritura, es

necesario saber cómo comenzar narrar algo.

Y en este post se dan tips para principiar bien cualquier

relato.

Cómo empezar a escribir historias

Cuando ya lleves algún tiempo de practicar la escritura

creativa, es casi seguro que descubrirás la mejor forma de

comenzar un relato.

Los escritores con un largo recorrido en el mundo de las

creaciones literarias tienen sus estrategias para empezar un

escrito. Las han descubierto o aprendido con la constancia de

escribir.

Pero en los inicios de la escritura narrativa, resultan útiles las

siguientes sugerencias para que las historias fluyan bien en el

texto de principio a fin.

Aquí están los puntos sobre cómo empezar a escribir

historias:

- Toma una idea o frase y empieza a escribir una historia.

- O a partir de una idea o un hecho construye la historia

en tu mente y después escríbela.

- Construye una historia a partir de la observación de un

mendigo, o un ratero o de cualquier otro personaje.

- En tu diario escribe lo que te acontezca.

- Escucha los cuentos o historias de la abuelita y,

después, escríbelas.

Toma una idea o frase y empieza a escribir

una historia

Uno de los métodos que se usan en los talleres literarios y

escuelas de escritura creativa es dar alguna frase a los chicos

para que, a partir de esa frase o palabra, desarrollen una

narración.

De modo que cuando carecemos de una historia previamente

elaborada en nuestra mente o que hayamos escuchado o

presenciado, resulta útil empezar a escribir a partir de una

idea o frase que se nos ocurra.

Podría ser, por ejemplo, la siguiente expresión: gatos negros.

¿Te apuntas a crear una narración a partir de esa frase?

A partir de la imagen gatos negros, cada quien creará una

historia muy particular.

Por ejemplo, podríamos iniciarla así:

Cuando esos gatos negros y que parecían tener rabia, se

metieron ese mediodía a la casona, intenté meterme al tambo

que estaba atrás de un ropero alto y viejísimo; a través de las

rendijas de ese mueble veía los grandes ojos encendidos de

los felinos; y sus maullidos penetrantes me hacían más

perder la calma; pareciera que esos animales negros me

buscaran a mí, pues no había nadie más en el galerón; mi

abuelita había ido quién sabe a dónde. Lo único cierto era

que el ruido y los maullidos que hicieron los gatos al entrar

al galerón me habían despertado, asustada; ahora, acurrucada

en el petate, donde dormía, trataba de ocultarme de esos

animales como escapados de un filme de terror...

¿Tú cómo iniciarías la historia a partir de la expresión "gatos

negros"?

Es el momento que ya te sientes a escribir tu narración.

O podrías continuar el relato a partir donde la dejamos.

En cualquiera de las dos formas que escogieras para sentarte

a escribir, notarás que la narración va fluir a medida que

escribas. Es lo grandioso de la escritura creativa: que la

imaginación te guía de la mano para redactar la historia, y te

lleva hasta el fin del relato.

A mí, por ejemplo, ya me entró la inquietud de continuar esa

historia de los gatos negros y la chica que trata de escapar de

los felinos.

Quizá el inicio del segundo párrafo de ese relato podría

seguir así:

...Tenía miedo que esos gatos, que ya se habían subido a los

costales de maíz, oyeran mi respiración o mi estornudo que

yo luchaba por reprimir...

Empieza a escribir una historia a partir de una frase o idea.

A partir de una idea o un hecho construye

la historia en tu mente y después escríbela

Aquí está otra forma sobre cómo empezar a escribir

historias:

Escoge una idea o frase y construye la historia en tu mente,

de principio a fin. Puedes quizá construir esa historia en tu

imaginación en tan solo un breve momento.

Pero podría llevarte días, semanas o incluso meses tener

acabada esa historia en la mente.

El Premio Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez en

una charla pública en Venezuela confió que él escribía un

cuento hasta que ya lo tuviera totalmente acabado en su

mente.

Durante el tiempo en que construyas la narración en la

mente, trata de tener la mayoría de detalles, como la forma

de actuar de los personajes y algunas frases que suelten

durante las escenas. 

Eso sí, sería bueno que tuvieras bien claro los tres momentos

básicos de una historia narrativa:

- Planteamiento (dar a conocer de qué trata la historia).

- El conflicto o nudo  (momento crucial de la narración

donde el protagonista lucha por conseguir algo, pero el

antagonista le pone trabas para que no lo consiga).

- Desenlace  (momento donde se soluciona el conflicto).

Mientras escribas la narración podrías agregar más detalles

sobre el planteamiento, el conflicto y el desenlace.

Si no lograrás tener todos los detalles de la historia, no te
preocupes, siéntate a escribir, que estos llegarán mientras

escribas.

Incluso, es probable que esa historia que construiste

previamente en la mente se modifique un poco mientras la

estés escribiendo.

Construye una historia a partir de la

observación de un mendigo, o un ratero o

de cualquier otro personaje

En los espacios que recorremos siempre va a haber algún

pordiosero, ratero, borracho u otro personaje de similar

calaña. Escoge a uno de esos seres, obsérvalo bien e imagina

el trauma que trae consigo y pregúntate qué es lo que lo llevo

a ser un borracho, ratero o méndigo. Trata de meterte en su

interior e imagina sus historia y cuéntala, escríbela.

En México hay una excelente novela corta llamada Noche de

califas, cuyo autor, Armando Ramírez, parte de la

observación de un méndigo para narrar la historia de un

padrote que frecuenta salones de baile y otros lugares donde

están las damas de la vida galante, de las que obtiene el

dinero para vivir.

El escritor, en la primera página de ese libro narró:

"Por la calle de Jesús María, a la altura de la calle de La

Corregidora, me encontré con una figura majestuosa

envuelta en un grueso abrigo que se sentía pesado, tal vez

por la mugre acumulada de años, y que daba la impresión de
nunca haberse quitado de ese cuerpo; la barba era rala y

larga, y en el rostro las costras de mugre no evitaban sentir

hacia ese hombre una sensación de divinidad. Eso fue lo

primero que me llamó la atención; pero a medida que me

puse a observarlo con mayor detenimiento se me fue

haciendo conocido, hasta que recordé que ese hombre era

alguien que en el pasado, durante algunos meses, había

influido de manera determinante en mi personalidad, o en mi

forma de ser".

¿Ya observaste detenidamente a ese mendigo con el que a

diario te encuentras? ¡Qué esperas!, invéntale una historia y

escríbela.

En tu diario escribe lo que acontezca

Todos los días nos ocurren historias en nuestras actividades.

Selecciona una y escríbela en tu diario personal. Si no llevas

un diario, entonces escribe esa historia en cualquier cuaderno

y tenlo a la mano para seguir escribiendo más sucesos en tu

vida.

Probablemente esas historias personales carezcan de algunos

de los tres elementos claves de una historia (planteamientos,

conflicto y desenlace). No importa, escribe esos sucesos. Son

una buena práctica para agarrar habilidad en la redacción y la

escritura de textos creativos.

Escucha los cuentos o historias de la

abuelita y, después, escríbelas

Nuestros abuelos, tíos, papás u otras personas con las que

convivimos guardan buenas historias en su mente. Busca la

forma de que las cuenten. No pierdas detalles. Y, después

escríbelas.

Si notarás que esos relatos de las personas mayores

carecieran del momento culminante de la narración que es

el conflicto, construye el conflicto o nudo a partir de las

historias que narre la abuelita u otra persona y, después,

escribe ese relato.

Conclusiones

Los tips que hemos visto aquí sobre cómo empezar a escribir

historias son muy útiles para iniciarse en la escritura

creativa.

Sin embargo, es necesario mencionar que las historias

narrativas dignas de publicarse y de reconocimiento deben

ser originales, imaginadas y creadas por ti. No importa, si

estas parten de alguna frase o historia que que oigas. Lo

esencial es que tus narraciones surjan de tu creatividad.