Sorpresas para todos: Outlet, videojuegos, informática, oferta top, ideas para casa, moda...

Sorpresas para todos: Outlet, videojuegos, informática, oferta top, ideas para casa, moda...
Como afiliado a Amazon obtengo ganancias de las compras adscritas que se generen a través de mi blog.

Reseña: El señor Wilder y yo, Jonathan Coe (Anagrama, 2022)

El señor Wilder y yo de Jonathan Coe es una novela que desde mi introducción ya recomiendo su lectura tanto para lectores amantes del cine y del cine clásico como también para lectores que busquen en sus lecturas lecciones de vida sin sentir que se las están dando; y bueno, también para lectores nostálgicos que disfrutan de las miles de sonrisas que les arranca una buena historia.


FICHA TÉCNICA.




Argumento

A sus cincuenta y siete, la carrera como compositora de bandas sonoras de Calista Frangopoulou, griega afincada en Londres desde hace décadas, no pasa por su mejor momento. Tampoco lo hace su vida familiar: su hija Ariane se va a estudiar a Australia, sin que aparentemente eso la entristezca del mismo modo que entristece a su madre, y su otra hija adolescente, Fran, está pendiente de interrumpir un embarazo indeseado. Mientras su profesión la arrincona y sus hijas, decididas o titubeantes, empiezan a abrirse paso por sí solas, Calista recuerda el momento en el que todo empezó para ella; julio de 1976, cuando en Los Ángeles, y ostensiblemente poco arreglada para la ocasión, se presenta con su amiga Gill en una cena que celebra un antiguo amigo del padre de esta: un director de cine setentón del que ninguna de las dos sabe nada, y que resulta ser Billy Wilder; Wilder, que, con su esquiva bonhomía, termina contratando a Calista como intérprete para que la asista en la filmación de su nueva película, Fedora, que se rodará en Grecia el año siguiente.

Y así, en la isla de Lefkada, el verano de 1977, Calista Frangopoulou empieza a abrirse paso por sí sola como más tarde harán sus hijas: y descubre el mundo, y el amor, y, de la mano de uno de sus grandes genios, una particular forma de entender el cine que está empezando a desaparecer. «Eso es lo que se lleva ahora. No has hecho una película seria a no ser que los espectadores salgan del cine sintiendo que les apetece suicidarse. (...) Les tienes que dar algo más, algo un poco más elegante, un poco más bonito», dice, primero sardónico y luego tierno, un Billy Wilder excelentemente caracterizado en las páginas de este libro; y más adelante añade: «Lubitsch vivió la gran guerra de Europa (me refiero a la primera), y cuando ya has pasado por algo como eso lo has interiorizado, ¿entiendes lo que quiero decir? La tragedia pasa a formar parte de ti. Está ahí, no tienes que gritarla a los cuatro vientos y salpicar la pantalla con ese horror todo el tiempo.»

Atenta a las enseñanzas del maestro, El señor Wilder y yo apuesta por una amabilidad cargada de contenido, capaz también de abordar con la mayor sobriedad el drama: las incertidumbres de la juventud, pero también las de la edad adulta; las fragilidades de la familia, sus fortalezas; el trauma privado y colectivo del Holocausto... todos comparecen en esta novela nostálgica, dulce, atemporal y encantadora, con la que vuelve un Jonathan Coe cargado de sensibilidad y oficio.




Mi opinión personal (sin destripes)


Desde la primera página hasta la última he saboreado esta maravilla de libro, he aprendido tanto de sus personajes, de sus vidas, de sus sátiras y de sus trabajos.


«la vida siempre tiene placeres que ofrecerte. Y deberíamos aprovecharlos».


Y que mi admirado Billy Wilder sea uno los protagonistas fue mi primera decisión lectora, también tenía muchas ganas de conocer las letras de Jonathan Coe. Y tras finalizar la lectura me quito el sombrero ante dos profesionales que consiguen reinar en sus trabajos y transmitir la pasión por sus oficios, hacer cine y escribir novelas.


Al maestro Wilder ya lo conocía por sus películas pero al maestro Coe no, y me he quedado con ganas de leer más obras suyas al impresionarme en primer lugar que logré que su novela sea de lo más cinematográfica que yo podía imaginar; y claro debía ser así pero también sé que es difícil conseguirlo. Pues él lo consigue empleando una serie de técnicas únicas para proyectar películas a través de las letras, una de las técnicas es escribir en forma de guion, también realizar referencias a películas, utilizar el lenguaje cinematográfico. Y lo más impresionante y más conseguido es transformar a Billy Wilder y a Iz Diamond en personajes literarios fascinantes.


Otra técnica es usar la observación de un tercero, Calista, para producir o recrear la última etapa de la vida de Billy Wilder. Es un gran acierto, ya que de este modo mezcla objetividad en fechas y sucesos históricos con emociones, percepciones y sensaciones vividas e imaginadas.


Calista, y yo (como lectora), observa y recibe sus lecciones profesionales y sus lecciones de vida. Va descubriendo sus vidas (momentos privados e íntimos), sus profesiones y el significado de cada una de sus películas. Y me ha encantado como Calista y Jonathan Coe nos acercan a estos personajes del cine realizando un retrato creíble y entrañable. Alabo que a través de este libro yo haya conseguido conocer también a Diamond, gran desconocido para mi e intuyo que también para muchos de vosotros. 


Al contaros todo esto hay que sacar una conclusión, el gran trabajo de documentación realizado por Coe. Reconstruye el rodaje de la película Fedora añadiendo anécdotas de todo tipo, del rodaje y de sus creadores (Wilder y Diamond). Y me hizo ver la forma de crear y sentir el cine de ambos, sus influencias, sus empeños por seguir con un cine anticuado, su modo de escribir guiones.


«Ernest Lubitsch era un nombre que Billy e Iz mencionaban continuamente, pero yo nunca había visto ninguna película suya. Lo que sentían por él trascendía claramente la admiración y rayaba en la adoración absoluta. El culto que se les profesa a los héroes. Me habían contado que Billy hasta tenía una labor de costura enmarcada en la pared de su despacho, con estas palabras bordadas: «¿Cómo lo haría Lubitsch?» Para él, la forma de enfocar una historia de Lubitsch era el colmo de la elegancia, la astucia y la insinuación, sustentado por una especie de ligero cinismo típicamente centroeuropeo».


Vuelvo a recomendar la lectura de El señor Wilder y yo para disfrutar de buenas letras, de buenos personajes, de luces y sombras de vidas que nos dieron, dan y darán muchas lecciones ofreciendo arte y creatividad al mundo. Y lo más mágico es que a pesar de sus tragedias vividas su cine y ellos mismos nos dan placer al arrancarnos miles y miles de sonrisas para llenar de chispas nuestra realidad.



Espero y deseo que los lectores que todavía no hayan visto las películas de Billy Wilder se acerquen a ellas y los que ya las hayáis visto creo que después de esta lectura las volveréis a ver y las sentiréis como si fuera la primera vez que las veis.


«Así que es una película que me cuesta ver con claridad. Pero, cuando consigo hacerlo, sigue siendo para mí algo muy bello. Algo muy bello que demuestra una gran voluntad. La urgencia de Billy por crear, por seguir ofreciéndole algo al mundo (un impulso esencialmente generoso), había sido tan fuerte como siempre cuando la hizo. Y, como ya le dije muy convencida en su momento, la película tiene mucha compasión por sus personajes: por esos personajes envejecidos en particular (ya sean hombres o mujeres) que luchan por encontrar su papel en un mundo al que ya solo le interesan la juventud y la novedad».






Jonathan Coe (Birmingham, 1961) estudió en las universidades de Cambridge y Warwick. En Anagrama ha publicado las novelas ¡Menudo reparto! (Premio John Llewellyn Rhys y, en Francia, Premio al Mejor Libro Extranjero): «El horror y el humor van de la mano en esta novela, a la que habrá que recurrir en el futuro cuando uno quiera saber qué sucedió en la Inglaterra de los años ochenta» (Ramón de España); La casa del sueño (Premio Writers’ Guild of Great Britain Best Novel y, en Francia, Premio Médicis Extranjero): «Si se organizase un festival de escritores verdaderamente originales, habría que invitarlo a él» (Javier Aparicio Maydeu, El Periódico); El Club de los Canallas (Premio Arzobispo Juan de San Clemente y Premio Bollinger Everyman Wodehouse): «La más colorida de las novelas sobre los años más grises» (Rodrigo Fresán); El Círculo Cerrado: «Retrato perfecto de la Inglaterra de finales del siglo XX, lleno de sátira. Un libro altamente devorable» (Kiko Amat); La lluvia antes de caer: «Si buscan novelas que no se lean de un tirón y traten al lector con respeto, si les gusta desentrañarlas y demorarse en ellas, háganse con un ejemplar» (Manuel Rodríguez Rivero, El País); La espantosa intimidad de Maxwell Sim: «¡Genial!... Lo tiene todo. Buenísima, apasionante, divertida, cí-nica, tierna, única; el final es deslumbrante» (Javier Puebla, Cambio 16); Expo 58: «La novela que habría escrito Graham Greene si hubiera leído más de la cuenta a un Evelyn Waugh poderosamente nostálgico» (Laura Fernández, El Mundo); El número 11: «El mejor retrato imaginable de la Inglaterra actual» (Da-vid Morán, Rockdelux); y El corazón de Inglaterra: «La mejor novela para entender el divorcio entre el Reino Unido y Europa» (Juan Cruz, El País).




ENLACES DE COMPRA:









¿Habéis leído este libro? ¿Tenéis ganas de leerlo? ¿Qué os ha parecido?



5 comentarios:

  1. Me ha llamado mucho la atención este libro por tu reseña. La verdad es que soy muy visual y por la portada no me habría parado a mirar dos veces este libro, pero ahora que he leído tu opinión me llama bastante la atención, lo meteré en mi lista de pendientes para leer en un futuro. No he leído muchos libros ambientados en el cine y me gustaría, así que gracias.

    Pirra (www.pirrasmith.com)

    ResponderEliminar
  2. Me encanta Billy Wilder. He visto muchísimas películas suyas y todas son puro cine del mejor. Hace tiempo leí una biografía suya que también me pareció muy buena. ¿Entiendo que este libro mezcla ficción y realidad? Calista es un personaje ficticio ¿verdad? Tomo nota del libro me apetece mucho.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  3. ¡Holaaaa!

    Veo que has disfrutado de este libro de principio a fin, me alegro mucho :D
    La verdad es que creo que no he visto ninguna película de Billy Wilder, o al menos no me sonaba el nombre... pero jo, ahora que lo mencionas tengo que informarme y ponerme con su cine si o si!

    ¡besotes!

    ResponderEliminar
  4. ¡Hola! He visto algunas peliculas de Billy Wilder, como Sabrina y las que tuvieron como protagonista a Marilyn Monroe. Qué lindo que hayas disfrutado tanto de esta lectura, por lo que yo tambien quiero leerla. Gracias por la reseña. ¡Un besito!

    ResponderEliminar
  5. Hola.
    Veo que has disfrutado mucho del libro y me alegro mucho, pero yo lo dejo pasar, a mi no me llama nada.
    Nos leemos.

    ResponderEliminar

Gracias por comentar. ♥

eXponsor. Gane dinero con su web incluyendo enlaces y anuncios.

¿Quieres un post en Carmen en su tinta?


¿Quieres ser influencer en SOCIALPUBLI?