Sueños, fantasías, realidades y compromiso. Ante el mar infinito de Pedro Luis Ladrón de Guevara es sentir y trasladar esas emociones sin juzgar. Es acertar con el dominio de las palabras para acariciar con ellas a sus lectores y hacerlos reflexionar.
Cinco partes para exaltar sus pasiones y sus pensamientos: MAR, PANDEMIA, ATALAYA, GRADUACIÓN, CRÓNICAS DE GUERRA.
No había colores.
Desde la cima´
Miraba la planicie
seca y desértica.
Rodeada la montaña
de arbustos y zarzas.
Matorral, hierbajos marrones y grises.
Y de repente, el tramonto:
sobre el agua azul cobalto
tiñe la llanura del mar
de naranjas y rojos.
Rayos y rayos rasgan
la tarde de colores,
arañazos de amarillo
en cielos cansados.
Y el valle se transforma
en océano infinito.
Y mi monte fue isla
circundada de belleza.
No es fácil escribir un poema, un poema con el que expresar sentimientos y emociones y hacer que el lector perciba el interior del poeta admirando su arte y su conocimiento del lenguaje.
Persona invisible soy
en la noche azuzada
por la ráfaga cortante
que mueve, agita y turba.
Velo semitransparante,
blanco visillo apenas.
Ante lo estridente, muda
la palabra no llega
a quien huye del estruendo
por el clamor pisado.
Soy sombra en la oscuridad
y ocupo mi no espacio.
La poesía es un yo, es transmitir. Y es llegar a una empatía global, cercana a los sentimientos universales como el amor, la amistad, la alegría, la tristeza... Y la poesía de Pedro Luis Ladrón de Guevara también es compromiso ante el mundo y ante los seres que lo habitamos.
La guerra es el reino de la muerte
con olas de terror en sus playas
y angustia cobijada en la cima
nevada y corrosiva de agua ácida.
¡Reino extraño, extraño su inventor!
Vivir sin primavera y sin flores
donde la niebla y el granizo químicos
ocultan el esplendor del sol.
Añorar aquel otro reino
donde disfrutar de la luz
solar, acogedora, cálida,
y en la noche, de las estrellas.
Entonces del cielo esperaba
agua, contemplación serena.
Nunca destrucción y exterminio
provenientes de las tinieblas.
Pedro Luis Ladrón de Guevara (Cieza, 1959). Catedrático de Literatura italiana de la Universidad de Murcia. Ha escrito monografías sobre Dino Campana, Marisa Madieri y Leopardi y los poetas españoles (2005). Estudia la vida y la obra de Claudio Magris y el epistolario de Jorge Guillén. Ha traducido a Claudio Magris, Mario Luzi, Giorgo Caproni, Antonio Tabucchi...
Ha publicado los libros de poesía Itinerarios en la penumbra, 2003, Cuando la piedra habla en edición de Emilio Coco, 2004, Escarcha sobre la lápida, 2007, Del sudor de las sirenas, 2015, y Volveré a donde estaba, 2017 con prólogo de Claudio Magris en su edición italiana.
En prosa los libros de relatos Los mundos de mi mundo, 2005 y El donante y otras historias, 2015 y la novela La campana rasgada, 2012.
Ha recibido el premio Ninfa Galatea-Catania por el libro-catálogo, con Zosi Zografidou, de fotografías y versos sobre Italia, Viaje en una Italia sin tiempo, 2011.
Sí que es difícil transmitir emociones y sentimientos mediante la poesía. Es un género que no suelo frecuentar, aunque cuando lo hago, lo suelo disfrutar.
ResponderEliminarUn beso.