Ir al contenido principal

Mi blog está afiliado a Amazon. Vuestras compras hacen posible que la tinta de Carmen nunca se seque. GRACIAS.

Errores que cometemos al empezar a escribir (y cómo evitarlos)

Cuando empezamos a escribir sentimos una mezcla de entusiasmo, miedo y muchas dudas. Todos los escritores —sí, todos— han pasado por esa fase en la que una historia se agita en la cabeza pero las palabras se resisten a salir. El problema no suele ser la falta de talento, sino los errores más comunes que cometemos al iniciarnos en la escritura. Detectarlos a tiempo puede ser la diferencia entre abandonar un proyecto o terminarlo con orgullo.


Ante la ayuda que algunos de mis seguidores me han solicitado, os doy algunos útiles consejos:


1. Esperar a que llegue la inspiración

Uno de los mitos más dañinos del mundo literario es el de la “inspiración”. Creemos que escribir depende de un chispazo mágico, de un momento perfecto en el que todo fluye. Pero la realidad es mucho más sencilla (y más dura): la inspiración se encuentra escribiendo. No debemos esperar a que las musas nos visiten, ya que pasarán semanas y semanas sin recibir su visita y nosotros sin escribir una sola línea. La disciplina es el mejor aliado. Debemos fijar un horario, aunque sean 30 minutos al día, y cumplir con él. El hábito genera ideas; no al revés. Y veréis que muchas veces no estaréis pendientes del tiempo e incluso necesitaréis más y más.

2. Querer escribir como otros

GRAVE ERROR. Cuando empezamos a escribir, sin darnos cuenta, intentamos imitar a los autores que admiramos. El gran logro del escritor llega cuando encuentra su propia voz. Eso no ocurre de un día para otro: se consigue leyendo mucho, escribiendo aún más y atreviéndose a sonar como uno mismo, sin miedo ni vergüenza. No busquemos ser “el próximo alguien”, busquemos ser la primera versión de nosotros.

3. Temerle al borrador imperfecto

Otro error frecuente es intentar escribir una primera versión impecable. Nada mata más rápido la creatividad que la autocensura. Un borrador debe ser caótico, torpe, lleno de tachones y correcciones. Su función no es ser perfecto, sino existir. La escritura real empieza en la reescritura: cuando ya tenemos algo que mejorar. Escribamos mal, porque solo así podremos escribir bien después.

4. No planificar la historia

Algunos autores se lanzan a escribir sin una idea clara del rumbo. Eso puede funcionar para relatos breves (que tampoco lo creo), pero en textos más largos (una novela o ensayo) la falta de estructura suele llevar al abandono. No es necesario un esquema rígido, pero sí una brújula: quiénes son los personajes, qué conflicto los mueve y hacia dónde queremos llegar. Tener un mapa ayuda a no perdernos en nuestras propias palabras.

5. Subestimar la revisión

No seamos gandules. Muchos principiantes creen que escribir es solo “poner palabras”. No es así, escribir también es borrar, cortar, ajustar y pulir. La revisión no es un castigo, es el proceso que convierte un texto común en algo memorable. Yo os aconsejo dejar reposar el texto unos días antes de releerlo: entonces cuando volvamos a él veremos los errores que antes pasaban desapercibidos y lograremos mejores formas de decir lo mismo.

6. No leer lo suficiente

Escribir sin leer es como querer cocinar sin haber probado nunca un buen plato. La lectura es el combustible de la escritura. Enseña ritmo, tono, vocabulario y estructura sin que nos demos cuenta. No solo se tiene que leer nuestro género favorito; un buen escritor es, ante todo, un lector curioso.

7. Compararse con los demás

En tiempos de redes sociales, es fácil caer en la trampa de medir un progreso de escritura según los likes o los éxitos ajenos. Pero cada proceso creativo es distinto. La comparación solo genera frustración. Lo importante no es la velocidad con la que se avanza, sino el hecho de seguir escribiendo.

8. No disfrutar del proceso

A veces nos obsesionamos tanto con publicar o con “ser escritores” que olvidamos lo esencial: disfrutar del acto de escribir. No hay nada más mágico que ver cómo una idea se convierte en historia. Hay que disfrutar el proceso, el resultado siempre será mejor.



Empezar a escribir no es un camino fácil, pero sí profundamente gratificante. Se trata de aceptar los errores como parte del aprendizaje sin nervios ni presiones, de entender que el arte nace del intento y de la constancia. Escribir no es cuestión de inspiración divina, sino de amor por las palabras y paciencia para domarlas. Jugar con ellas con alegría nos ayudará a vencer a nuestros miedos.

Así que si estáis comenzando, no temáis. Todos los escritores han sido principiantes alguna vez. Lo importante es sentarte frente a la página en blanco, incluso en los días difíciles, y recordar que cada palabra escrita —por imperfecta que sea— nos acerca un poco más a nuestra mejor versión.


Recordad que en mi blog existe una seccíón:  ESCRIBIR BIEN con artículos que os pueden ayudar en vuestro proceso de escritura.


¡FELICES ESCRITURAS!








Carmen en su tinta – blog cultural
Mi ☕️ ko-fi.com/carmen


Mi blog está afiliado a Amazon y con vuestras compras en los enlaces que os dejo y en los banners de mi blog me ayudáis a seguir trabajando en Carmen en su tinta. 

MIL GRACIAS.


Comentarios

  1. ¡Hola! Tienes mucha razón, escribir no es tarea fácil, pero te da grandes satisfacciones. ¡Besos!

    ResponderEliminar
  2. Hola, Carmen.
    Me parece muy interesante, juiciosa y detallada tu publicación.
    Un fuerte abrazo :-)

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Gracias por comentar. ♥

FloraQueen es un servicio internacional de envío de flores

FloraQueen es un servicio internacional de envío de flores
Envía flores a domicilio dónde y cuándo quieras

Estas fiestas las elfas de Carmen en su tinta preparan regalos especiales que cuentan historias.

Estas fiestas las elfas de Carmen en su tinta preparan regalos especiales que cuentan historias.
Amazon en su tinta

Entradas populares de este blog

«Oler» se escribe sin h y «huele» se escribe con ella, explicación

Este mes en mi sección Escribir bien voy a explicar por qué «oler» se escribe sin h y «huele» se escribe con ella. A veces me preguntan esto y cosas más raras... y a veces, aunque no lo creáis, veo escrito  « holer » . Cosas que pasan, utilizar correctamente nuestra lengua tiene su dificultad.  ¿Oler, huele?. Nos resulta incomprensible cuando queremos razonar una respuesta, entonces vamos a la página web de la Real Academia Española y nada de nada, no encontramos la explicación y decidimos que mejor consultar a nuestro amiguete filólogo. Bien, pues vuestra amiga filóloga quiere daros la respuesta más correcta y quiere que quede por escrito en su blog para futuras consultas.

Los dias que Cantaba el Viento, Fernando Rodrigo Calvo Lepe (Editorial Desierto, 16 de noviembre 2025)

Al escribir la promoción del libro: Los días que Cantaba el Viento de Fernando Rodrigo Calvo Lepe he sentido que es y será una lectura que no debemos dejar pasar y en este artículo comparto lo que yo he percibido sobre libro y autor . Lo primero que leo sobre este libro es que es un romance histórico desarrollado en el auge de la explotación del salitre "el oro blanco" en Chile, la obra es una epopeya que recorre desde 1914 hasta 1979, en donde Lita y José María, sus personajes principales, cruzan por este mundo de escasez y soledad en el desierto de atacama. Ya con esta pequeña información siento que hay que recibir a este libro con ilusión y admiración; siento que llegará como una suave brisa al principio, pero con tal fuerza que nos removerá emocionalmente al ir pasando páginas.  Y sé que para mi y para vosotros será un deleite literario que saborearemos de principio a fin. En sus páginas encontraremos un cruce perfecto entre emoción, memoria y humanidad. Siento que ...

Libros de cocina para dar un toque literario a tu mesa

Hay libros que se leen, libros que se subrayan… y libros que se leen, se subrayan y que se cocinan .  En este artículo reúno algunos de los títulos más especiales de cocina: obras que inspiran, que huelen a cocina y que logran que incluso quien no disfruta entre fogones quiera intentarlo.  Ante las próximas fechas festivas muchos de nosotros buscamos ideas para cocinar mejor, para disfrutar más o para regalar con acierto. A petición de un nuevo seguidor he creado una selección cuidada muy al estilo de Carmen en su tinta.  Encedamos los fogones, abramos los libros que toca disfrutar de sabores y de sobremesas que se alargan. Este artículo es para todos: para cocinillas y para no cocinillas. Hoy me pongo el delantal, literario, para reunir esos libros de cocina que no solo llenan la mesa, sino también la imaginación. Títulos que huelen a historia, a viaje y a hogar, perfectos para dar un toque literario a tu mesa y cocinar con el corazón.

Las comillas y su combinación con signos de puntuación

Este mes en mi sección de Escribir bien vamos a repasar la correcta utilización de las comillas combinadas con signos de puntuación. ¿Vamos? En la viñeta anterior repasamos el uso de las comillas, pero ahora os planteo una pregunta: ¿Habéis observado que el punto en algunos casos aparece dentro de las comillas y otras veces aparece fuera? ¿Dónde debemos colocarlo? 

Yo tenía una casa frente al mar, Pere López Prats (Edición Estándar, 2025)

ZOË COMUNICACIÓN  me informa de un nuevo libro para promocionar en mi blog: Yo tenía una casa frente al mar de Pere López Prats. En carmen en su tinta  os cuento por qué esta historia merece hacerse un hueco en nuestras próximas lecturas compartiendo toda la información que he recibido con mis lectores, sin omitir nada de nada.  Intuyo qué quizá, después de leer esta novela, todos sentiremos que el mar nos llama por nuestro nombre y desearemos una casa frente al mar. “Estas páginas no son un relato, sino una invitación a construir, en medio del ruido y la incertidumbre, esa casa frente al mar que todos llevamos dentro.”   Una reflexión sobre la conciencia. Una novela que relata unos hechos que pueden llegar a ocurrir en cualquier ser humano cuando perdemos nuestro centro.